Crucero de reposicionamiento. De Marsella a Dubai.
Publicado el 18 de mayo de 2016 por Alicia.
Publicado el 18 de mayo de 2016 por Alicia.
Ya os hemos hablado de los cruceros
transatlánticos y de cómo nos gustan por ofrecer la oportunidad de conocer
nuevos lugares y al mismo tiempo disfrutar del barco en alta mar.
Pues bien, otro tipo de cruceros al que
también somos muy aficionados son los cruceros de Reposicionamiento, muy
parecidos a los transatlánticos ya que
son de larga duración pero que puedes encontrarlos en cualquier lugar del mundo
y en cualquier ruta.
Tienen, al igual que los cruceros
transatlánticos la ventaja de poder disfrutar tranquilamente del barco y la
navegación relajadamente y permiten también conocer nuevos lugares, algunos de
ellos poco conocidos.
En noviembre de 2014 decidimos embarcar en
el Costa Serena, un barco de buen tamaño, ya conocido por otra ruta que realice
por Canarias y que, a pesar de su colorista decoración, resulta un barco muy
cómodo por su distribución. En este caso, el Costa Serena se iba a posicionar
en Emiratos Árabes para realizar cruceros de una semana en esa zona.
Nuestra ruta empezaba en Marsella y el
destino era Dubai con escalas en Savona, Nápoles, Catania, pasó por el Canal de
Suez, Aqaba, Eilat, Safaga, Salalag, Muscat, Al Fujairah, Abu Dhabi y
finalmente, dos días en Dubai. Hubo un par de cambios sobre la ruta por motivos
de seguridad y es que se anularon las escalas de Alejandría y Sharm el Sheikh
que se cambiaron por las ya mencionadas Catania y Eilat. Nosotros
particularmente, ya estamos acostumbrados a los cambios de ruta pero en este
caso concreto, salimos ganando con el cambio.
En cualquiera de los casos, nos pareció una
ruta muy interesante y ese fue el motivo de la elección. En total, 23 días de
crucero que no está nada mal.
Sobre la ruta, simplemente decir que fue una
maravilla visitar todos esos los lugares. Savona es una escala de trámite ya
que allí es donde embarca y desembarca el grueso del pasaje. La ciudad es
pequeña pero siempre vale la pena dar una vuelta por sus calles para admirar la
arquitectura.
Nápoles es una vieja conocida, visitada en numerosas ocasiones,
pero a la que siempre nos gusta volver, pasear y descubrir nuevos rincones.
No conocíamos Catania y nos sorprendió
gratamente a pesar de no poder prepararnos la escala con antelación ya que fue
una de las que se cambiaron sobre la marcha.
En Eilat decidimos realizar una excursión
con la naviera para visitar Masada y darnos un baño en el Mar Muerto.
La escala
de Aqaba la aprovechamos para realizar una visita de todo el día a Petra, lugar
legendario y donde os recomiendo ir algún día. Esta excursión la realizamos
también con la naviera pues al igual que en Eilat, las distancias son muy
largas (hay unas dos horas de trayecto de ida y otras dos de vuelta) y en esos
casos preferimos asegurar nuestra vuelta al barco. Con esas distancias,
cualquier fallo en medio del desierto, puede hacer que se pierda el barco y no
queríamos preocuparnos. Nuestro objetivo era disfrutar al máximo.
Pasamos el canal de Suez durante la noche
avistando la ciudad de Suez a primera hora de la mañana y navegando
relajadamente hasta nuestro siguiente destino, Safaga en Egipto. Esta escala se
realiza fundamentalmente para que los cruceros puedan realizar excursiones a la
maravillosa ciudad de Luxor, una excursión también muy larga pero que para
quien no ha visitado Egipto, seguro que es imprescindible. En nuestro caso, no
nos bajamos del barco. Visitamos hace ya unos cuantos años Egipto al completo y
a pesar de que la ciudad vale la pena más de una visita, realizarla después de
un largo viaje de autocar para solo pasar unas pocas horas en la visita, no nos
compensaba. Ese día disfrutamos del barco para nosotros solos.
Nuestra siguiente escala, Salalah, que ya se
encontraba en Omán. Salalah es un pequeño pueblo de pescadores, con poco
atractivo y con un puerto bastante alejado del centro de la ciudad. De nuevo
optamos por una excursión de la naviera por simple comodidad y realmente
aprovechan bien la ruta para mostrar los lugares de mayor interés. Un buen
lugar para realizar compras y también para disfrutar de su magnífica playa.
Muscat, una gran ciudad, con una ubicación
inmejorable y con una orografía que la hace atractiva y al mismo tiempo
misteriosa. Recorriéndola se encuentran numerosos recovecos que muestran
lugares de fisonomía muy diversa. Cuenta con una magnífica mezquita que es de
visita obligada. En esta ocasión optamos por tomar el autobús turístico. Se
puede tomar en el mismo puerto, al bajar del barco y permite visitar todos los
lugares importantes de la ciudad a excepción de la mezquita a la que hay que ir
en taxi. Nos gustó Muscat.
Al Fujairah forma parte de los emiratos pero
no cuenta con tantos atractivos como sus vecinos. Aquí de nuevo optamos por una
excursión de la naviera para descubrir la ciudad a fondo.
En Abu Dhabi volvimos a tomar el autobús
turístico. Resulta muy cómodo pues, además de llegar hasta el lugar más
emblemático de la ciudad, la gran mezquita, tiene dos circuitos diferentes y
con uno de ellos se puede llegar al Ferrari World y al circuito de Fórmula 1.
Muchas cosas para una sola escala pero es una posibilidad para visitar los
lugares más importantes de la ciudad.
Y por último, Dubai, donde el barco hacía
noche y permitía visitar la ciudad durante dos días. En nuestro caso, lo aprovechados
al completo pues nuestro vuelo de regreso partía bien entrada la noche. Una vez
más, tomamos el autobús turístico para los dos días que permite visitar muchas
cosas, ofrece entrada gratuita al museo de la ciudad, un paseo por el Creek y
también disponen de un autobús lanzadera que enlaza con el aeropuerto. Bien
combinado, permite hacer muchas cosas.
Más adelante os hablaremos con detalle de
todas estas escalas que son muy interesantes y atractivas.
Respecto al barco, estaba en muy buen estado
de conservación. Su decoración es algo estridente como muchos de los barcos de
Costa pero dispone de amplios salones donde se pueden realizar diversas
actividades de día y durante la noche. El servicio fue bueno al igual que la
gastronomía y como siempre quiero destacar la animación del barco que en Costa
suele ser muy variada y permite realizar actividades muy diversas y para todos
los gustos.
Tanto el embarque en Marsella como el
desembarque en la impecable terminal de cruceros de Dubai funcionaron
correctamente. En Marsella embarcaba poca gente porque en realidad el crucero
comenzaba en la siguiente escala, Savona y eso hizo que fuera muy rápido. En
Dubai, la nueva terminal que justo inauguraban aquel día, ofrece todo tipo de
servicios para el crucerista y el personal es muy atento.
Como conclusión, deciros que un crucero de
reposicionamiento puede significar una opción muy interesante por la ruta que
realice. Si a eso añadimos que el barco o la naviera nos resulten atractivos,
podemos conseguir una combinación perfecta para pasar unos días de crucero
magníficos. Son varios los barcos que realizan este tipo de rutas durante el
año, cuando las compañías trasladan algunos de sus barcos para posicionarlos en
una zona distinta y si se puede, vale la pena aprovechar la ocasión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en este blog.