Crucero Japón - YOKOHAMA y KAMAKURA
Publicado el 24 de julio de 2016 por Antonio.

Después de un día de navegación, nuestro último día de crucero, atracamos en el puerto de Yokohama a primera hora de la mañana.

Al desembarcar cogemos un taxi para ir al hotel y dejar las maletas antes de dedicar el día a "hacer turismo".

Teníamos reserva en el Hotel Mystays Yokohama que se encuentra a unos 5 minutos a pie de la estación de tren de Koganecho y la estación de metro de Bandobashi. Muy buena relación calidad precio y buena ubicación por lo cercano al tren y metro.

Como ya habíamos visitado Yokohama cuando embarcamos, nuestra primera opción es visitar la bonita ciudad de Kamakura así que:
Cogemos el tren en Koanecho station, línea roja Keikyu main line y bajamos en Yokohama station (3 paradas), aquí cogemos otro tren para Yokohama JR que es la estación desde la que salen los trenes para Kamakura, en este último trayecto usamos la tarjeta Suica ya que no vale el Rail Pass. De Yokohama JR a Kamakura sí vale el Rail Pass

Situada a unos 50 Km de Tokyo y rodeada por montañas, excepto la parte sur que limita con la bahía de Sagami, la ciudad de Kamakura es famosa por sus templos y santuarios, especialmente el Templo de Kotokuin, que alberga el famoso Gran Buda (Daibutsu), que será nuestra primera visita.

Junto a la estación de Kamakura está la estación del tranvía que lleva al templo del Gran Buda. Cogemos el tranvía línea Enoden y bajamos en Hase station (3 paradas) desde allí hay que caminar 5 minutos por una colorida calle.



El templo de Kotokuin alberga la segunda estatua de buda más grande de Japón, Daibutsu, el Gran Buda al que se puede acceder a su interior.

Esta majestuosa estatua de bronce, de más de 13 metros de alto y 93 toneladas de peso, se fabricó en 1252 y fue ubicada, originalmente, dentro de un gran salón del templo. Sin embargo, los edificios del templo fueron destruidos por un tsunami al final del siglo XV, y desde entonces el Buda está al aire libre.

Para nuestra siguiente visita hemos de volver a la estación de tren de Kamakura, así que volvemos sobre nuestro pasos y cogemos el mismo tranvía pero en dirección contraria y en tres paradas estamos en Kamakura station. Aquí cogemos el bus 23 y tras 6 paradas bajamos en Jomyo Ji, que está a un corto paseo del Hokokuji Temple

El Hokokuji Temple, también llamado Take Dera o templo de bambú, es famoso por su bosque de bambús que hay detrás de la sala principal.

Aunque ver el bosque de bambú fue uno de los principales atractivos para visitar este templo, una vez aquí nos damos cuenta que tiene otros atractivos que hacen que la visita valga la pena. 





La entrada es preciosa, medio oculta entre árboles centenarios y los jardines y templos interiores son realmente muy bonitos.


Eso sin olvidar sus jardines Zen.



Su magnífica campana

O sus numerosas tallas en madera

Volvemos en el mismo bus y bajamos en la parada del templo Tsurugaoka

El templo Tsurugaoka Hachimangu está a 15 minutos a pié desde la estación de Kamakura y para llegar, si vienes desde la estación, se pasa por el camino peatonal de Danzakura que tiene cientos de cerezos y una zona con estanques que son una autentica belleza

El Santuario Tsurugaoka Hachimangu está abierto 24 horas al día todos los días del año, la entrada es gratuita y es el Santuario Shinto más importante de la ciudad de Kamakura.

Fundado por Minamoto Yoriyoshi en 1063, y agrandado y cambiado de lugar a su actual localización en 1180 por Minamoto Yoritomo, el fundador y primer shogun del gobierno de Kamakura, en su interior alberga el Museo Nacional de los tesoros de Kamakura y el Museo Nacional de arte moderno, ambos de pago.



Junto a los edificios principales, de color rojo bermellón, está la sala del tesoro y un parque con estanques, un puente y un torii.

Los estanques de loto son todo un espectáculo para la vista


Para reponer fuerzas nada mejor que un restaurante de la tierra.

Es hora de volver a Yokohama así que invertimos el trayecto en tren y acabamos el día/noche paseando por Minato, uno de los barrios cerca del puerto que por la noche está especialmente atractivo por su iluminación y su gigantesca noria tan popular en todo Japón.


Os dejo con estas imágenes que valen más que mil palabras.